Una playa,
Escondida en los tesoros de mi subconsciente
Me permite tomarme una aventura.
Evitar las voces de quienes me molestan.
Cerrarme al publico
Y solo tirarme al mar
Sin que me importe el hecho de no saber nadar.
El mar es muy negro por dentro
Tanto que por un segundo pienso que el sueño acabo
Y que solamente estoy con los ojos cerrados.
Pero después una luz y entiendo que el sueño sigue.
Una mano me rescata
No llego a ver su rostro
Pero no me inquieta.
Es mi sueño, y no hay nada que pueda lastimarme.
Sigo con los ojos cerrados
Pero escucho voces de quienes supongo me rescataron.
Es una pena,
Que solo existan en lo más fondo de mi cabeza